sábado, 20 de febrero de 2010

El Auriga del FCB

Llevo mucho tiempo esquivando escribir acerca de fútbol, y más en concreto acerca de Pep Guardiola, entre otras cosas, porque ha estado de moda, porque se le ha subido a los altares (con méritos), porque ha sido co-protagonista, porque se ha dicho todo lo que se puede decir, hay blogs dedicados exclusivamente al "paradigma guardiola", hay artículos, comentarios, vídeos y un largo etc.

En ésta ocasión escucho por la radio algo así como: "no habrá más lesiones. si no nos permitimos lesionarnos, no nos lesionaremos." Inevitablemente me ha evocado directamente a un comentario de la película-documental "Ayurveda" dónde decían: es muy sencillo, decimos a nuestra mente ¡no enfermes! y no enfermamos nunca.

Ésto suena extraño porque en la mentalidad materialista, pragmática y causalista que tenemos, lo primero que se piensa es: si el músculo esta roto, esta roto y punto ya puedes decir a la mente lo que quieras. Y así es, sin lugar a duda, pero ¿en que momento empezó a romperse la fibra y cuando esta definitivamente rota? como casi todo se trata de un contínuo, de una delgada línea por la cual oscilamos cuales funámbulos tambaleándonos a cada paso de uno a otro lado intentando mantener el equilibrio, intentándo no caer.

Personalmente, desde que el Barça gano su último título, me digo para mis adentros, han llegado a la cresta de la ola, y como dice Federer lo fácil no es llegar sino mantenerse. Pep el año pasado no cesó en su empeño de radicar el éxito (entre otras cosas) en decir "el próximo partido" si cambiaban el punto de mira más allá no tendría sentido, se desvirtuaría y probablemente empezarían a caer derrotas, cosa que no sucedió salvo las últimas jornadas de liga cuando estaba virtualmente decidida, e incluso en ese momento, se conjuraron para no aplazar más el alirón ganando en el Molinón, no querían ni siquiera hacer fríos cálculos para cantar el alirón en el Nou Camp.

Otro ejemplo acerca de la motivación y las "oleadas" o ciclos de la mismas es la que dice que estamos gobernados por las personas erróneas, porque la motivación de los candidatos es ser el mejor candidato para llegar a su meta, que es presidir un gobierno, salvo ocasiones especiales que un estado requiera una reforma a largo plazo y que la verdadera motivación sea refundar el país, el presidente de un gobierno cuando sale elegido ha llegado a su tope, por eso dicen que justo en ese momento son las personas menos idóneas para gobernar, son los segundos de abordo (minsitros o gente de partido) o la oposición la que con la motivación de quitarle el sitio tienen el mayor impulso para hacer, crear y aportar cosas nuevas.

Volviendo a lo que ha dicho Pep de las lesiones, la prensa dice que ha habido una reunión para dictaminar que ocurría, y parece que la opinión que han sacado a mi personalmente me convence (seguramente porque era lo que hace días quería oír).
La motivación no es la misma, se arrojaba al aire la pregunta ¿cómo es posible que este año con menos partidos, menos ambición por ganar cosas caigan y el año pasado que iban a tope no rompiera casi nadie?
Precisamente por eso, porque se han dado permiso para enfermerar, han dado permiso para que psicológica-fisiológica y si me apuran espiritualmente el cuerpo se relaje y rompa, ¿y es casualidad que sea mayormente en puestos defensivos?
Probablemente lo sea, pero permítanme que opine que los defensas saben que tienen menos competencia y saben que aunque falten un mes cuando vuelvan volverán a ser titulares, y por lo que dicen el caso de Alves fue el contrario, por forzar la máquina para que no le quitasen el puesto forzó por llegar antes, y la avaricia rompió el saco. En éste mismo sentido, llevandolo a escala doméstica me da la impresión por lo poco que he visto en mi ámbito que cuando a uno le hacen un contrato precario, por instinto intenta quedar bien, estar dispuesto a todo, hacer todo lo mejor posible, en búsqueda de una posible "superviviencia" laboral a tal precariedad, incluso sólo se "permíte" tomar la baja por enfermedad cuando la enfermedad es lo suficientemente incapacitante o peligrosa como para no evitarlo.

Ésto en cuanto a las lesiones, en cuanto a lo demás, reconozco que Guardiola ha conseguido establecer el sentido común y la racionlaidad a un grupo de personas muy heterógeneo, desde su llegada su discurso era pausado y sin sobre saltos, solo ahora con la autoridad moral que le avala, se permite la licencia de ironizar en rueda de prensa.

Llegar a un sitio, siendo jóven, con escasa experiencia demostrada e implantar un paradigma y no apearte del mismo pase lo que pase..., hay que tener valor, y obtuvo premio a ese valor, los resultados y la suerte que acompaño pero tengamos en cuenta que como dice el viejo adagio: el viento solo sopla a favor de los que saben a dónde van, y en el campo del Chelsea o en la Intercontinental (entre otros) les vino la suerte a verles.

Hoy en día está de moda "la inteligencia emocional" "el factor humano"...toda una serie de bibliografía que ha venido al rescate más que de un solar, de una especulación de la inmobiliaria filosófica, y además parece bien rentable.

Guardiola ha armonizado, fue nombrado por un consejero cual oráculo(y un viejo sabio Cruyff siempre a retaguardia, para encontrar la solución buscó principalmente en el interior (como si se tratase del caballo de troya encontró reflejo en la masía), a pesar del código interno, nunca se oyeron voces disidentes dentro de la disciplina (eto´o es así y ya dijo en verano que prefería no tenerlo), trajo un par de vejestorios que habían ganado todo en otros ámbitos para que dieran experiencia, y de hecho a Henry éste año ya no se le nota igual, consiguió motivar a todos (todo el club, ni Laporta hacía Lapuertadas) y homogeneizar el discurso, gestionó los sentimientos e hizo usó del emotivismo cuando ya poco más se podía hacer y según se dice y cómo no puede ser de otra manera el 80% era trabajo de campo y despacho, hasta alcanzar lo obsesivo, incluso me atrevo a especular que eligió la temporada que hay entre medias de la eurocopa y el mundial como la señalada, pues no sólo de inspiración se logran los éxitos.

El caso que tomo las riendas del auriga guiado por hermes cruyff navegó en su Odisea particular y fundó su nueva Ítaca a base de lo que encontró en su caballo de Troya: racionalidad, emotividad y personas.

Me temo que tendrá que acudir a otro oráculo para que le ayuden a saber cuando tiene que abandonarse al néctar y ambrosía.

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